Es un contrato mediante el cual el Fideicomitente entrega al Fiduciario bienes y/o dinero para que en vida pueda seguir administrando y disponiendo de ellos de acuerdo a las directrices dadas por el primero. A su muerte, el contrato adquiere el carácter de irrevocable y será administrado por el Fiduciario acorde con las reglas o instrucciones establecidos por el titular; realizando la entrega de los bienes a las personas designadas y en las condiciones pactadas en el contrato.
Si desea obtener más información le invitamos a leer este artículo en nuestro blog donde hablamos de una forma más amplia acerca del fideicomiso testamentario.